jueves, 22 de diciembre de 2011

¡QUÉ CALOR Y QUÉ DOLOR!





Cándida:
Virtú, si no dormís siesta
voy a ir para tu aposento
porque en mi casa no cuento
con pileta ni manguera
y no encuentro la manera
de refrescar mi osamenta
quiero echarme en tu pileta
y practicar un clavado
ya me depilé el cavado
y arreglé la bicicleta.

Virtud:
¡Si, Cándida, aquí te espero!
me pongo el traje de baño
y mientras, bajo el alero
unas toallas voy colgando
ya no se aguanta el calor
el viento está calcinando,
a más la luz se cortó
yo ya me estoy cocinando.

Cándida:
Ahí la invité a mi muchacha
pa que prepare las cosas
la cámara, unas hilachas
como toallas y unos lentes,
porque este sol, de repente
nos puede quemar la vista
y no quiero, ¡Dios me asista!
pasar a ser no vidente
de paso te he de contar
lo que oí de una beata.

Virtud:
¡Ay, contame, por favor!
No digas que es milagrera
a lo mejor al ser nueva
no esté tan llena su agenda
y así más rápido atienda
de los fieles el clamor
porque no aguanto el dolor
del hombro del lado izquierdo
si a veces creo que lo pierdo
y ya ni dormirme puedo.

Cándida:
¡Ay, hermana, justamente!
fue una hermanita argentina
siempre combatió al demonio
y en la Capilla Sixtina
la van a beatificar
porque según testimonio
le curó el hombro derecho
a una señora afectada
como vos y como yo
de tendinitis fatal
en tendón supra espinoso.
Entonces vi una esperanza
para curar nuestros males
no sé bien cómo rezarle
hay que entrar al internet
y buscar las oraciones
porque dice que ella escucha
si le pedís con fervor
con gran confianza y fe mucha,
vos sos de la Cofradía
hablale e intercedé.

Virtud:
Tendríamos que saber
el nombre de esta Beata
así puede interceder
ante nuestra peticiones
y nosotras oraciones
le podemos ofrecer.
aún no se supo nada
dentro de la cofradía
ya buscaré en una guía
el teléfono papal
así puedo averiguar
el día de los oficios
en que a esta religiosa
habrán de beatificar.

Cándida:
Pero volviendo al calor
¡Qué bien pasamos la siesta!
ya transcurrió la hora peor
y se nos enfrió la testa
pero quedamos las tres
como ovejas apaleadas
hondamente relajadas
y despojadas de estrés.
Yo ya dejo de payar,
la reposera me gana.

Virtud:
Nos dormiremos un rato,
la modorra se irá yendo
y luego estaremos viendo
las fotos que nos tomamos
en la pileta nadando
o lanzando nuestros cuerpos
en diferentes estilos
que a pesar de nuestros kilos
aún siguen siendo esbeltos.